Patronato logró su primera victoria en la Superliga el día de Santa Teresita, después del día de San Miguel Arcángel y con mucha agua bendita.
El fútbol debe ser el deporte en el que las cábalas, los rituales y las creencias, son los puntos donde un fanático, un técnico o un equipo se pueden aferrar.
Lo cierto, es que si algo hizo Patronato está semana, fue aferrarse más que nunca en sus fuentes, tanto futbolísticas, como mentales y espirituales.
Es que Mario Sciacqua, devoto de San Expedito, recibió una estampita de su Santo. El padre Diego Rausch, asesor espiritual de la institución, estuvo el sábado con el plantel, donde charló con ellos, además de recorrer los vestuarios. Justamente, el sacerdote estuvo el día de San Miguel Árcangel. Y este domingo, Patronato venció a Talleres, el día de Santa Teresita.
¿Los Santos ayudaron al Santo? Puede que sí, como puede que no. El Patrón ganó su partido dentro de la cancha, pero con la presencia del Padre Diego, que estalló tirando agua bendita post triunfo y antes de dar la misa en la Parroquia Santa Teresita, con Mario Sciacqua tirando agua en forma de cruz dentro de la cancha en los inicios de cada tiempo. Patronato volvió a sus fuentes espirituales.
Por: Gabriel Obelar
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