Sciacqua continúa apostando a lo mismo

Este martes por la mañana, en el Estadio Grella, el Rojinegro volvió a sumar fútbol pensando en el próximo viernes, donde no aparecen modificaciones. 

Sebastián Bértoli; Lautaro Geminiani, Agustín Sandona, Renzo Vera, Bruno Urribarri; Mauricio Sperduti, Damián Lemos, Santiago Briñone, Lautaro Comas; Gabriel Carabajal; Facundo Barcelo. 

Mismo equipo, diferente sistema. Hasta ahora ese es el lema que utilizaría Patronato pensando en Newell’s, el próximo viernes en el Coloso Marcelo Bielsa.

Es que Mario Sciacqua se siente conforme y sabe que el rendimiento del equipo es bueno, por más que tenga que corregir detalles, por tal motivo, por segunda vez consecutiva, volvió apostar al 4-4-1-1, con Briñone por encima de Ledesma, por el rodaje y lo que viene mostrando el juvenil del Patrón.

El plan, por lo menos en la previa, será una presión alta sobre la salida de Newell’s, con un elenco intenso, pero también con mucha verticalidad por las bandas. Más allá de los roles, la meta es abastecer de buena manera a Carabajal y que él sea el encargado de la gestación de juego.

Hasta el momento no habría dudas, pero este miércoles, por la tarde en el Estadio Grella, el plantel se volverá a entrenar, con vistas al cotejo contra la Lepra.

PELEANDO SU LUGAR

Dentro de los minutos de fútbol que sumó el primer equipo, uno de ellos fue contra los suplentes, que formaron con: Federico Costa; Lucas Ceballos, Walter Andrade, Matías Escudero, Nicolás Pantaleone; Abel Peralta, Federico Bravo, Pablo Ledesma, Agustín Guiffrey; Matías Garrido y Juan Cruz Franzoni. 

CON LA RESERVA

Un combinado de la Reserva, que puede tomarse cómo un probable pensando en el viernes, en el duelo preliminar en Parque Independencia, aparecieron Nicolás Royón y Marcos Minetti, que sumaron minutos, pero no jugarían en la tercera.

AFUERA

Por más que estuvo a disposición para entrenar, Ezequiel Rescaldani tuvo una charla con Mario Sciacqua y Facundo Besada, donde luego el delantero terminó sumando actividades de kinesiología.

Por: Gabriel Obelar